Cuando tu casa necesita protección contra la lluvia y de la nieve, el techo es la primera línea de defensa. Los propietarios de viviendas que también desean optimizar la luz y el espacio pueden optar por incorporar un techo con buhardilla. ¿Qué es un techo con buhardilla? Una buhardilla es como una pequeña habitación con una ventana que se proyecta verticalmente hacia afuera desde el resto del techo inclinado. Cuando conviertes el espacio del ático en un espacio de vivienda, la buhardilla permite contar con ventilación cruzada, deja entrar la luz natural y aporta estilo arquitectónico.
A continuación, te contamos lo que debes saber sobre los diferentes tipos de este estilo de techo, y también cómo un techo con buhardilla puede mejorar la funcionalidad y el estilo de tu casa.
¿Qué es un techo con buhardilla?
Una buhardilla está construida y colocada en un techo inclinado. Particularmente, siempre tiene por lo menos una ventana. Las buhardillas tienen techos y vienen en una variedad de tamaños y formas , y la opción adecuada dependerá del estilo de tu casa. Las buhardillas complementan significativamente la arquitectura existente de una casa y aportan un toque visual y atractivo exterior.
Las buhardillas le otorgan al techo una sensación de mayor altura a una vivienda con forma horizontal. Genera espacio de uso, altura y luz natural, lo que le permite ofrecer una variedad de posibilidades de diseño exclusivo.
¿Cuáles son los beneficios de un techo con buhardilla?
Además de aportar estilo, simetría y un punto focal atractivo al exterior de tu casa, las buhardillas permiten ventilar e iluminar espacios oscuros. También generan más espacio y, a veces, permiten ubicar un baño o una habitación en un área de la planta alta. Las buhardillas también interrumpen la larga extensión del techo y, así, generan un nuevo detalle arquitectónico.
¿Cuáles son los diferentes tipos de techos con buhardilla?
Los techos con buhardilla tienen muchas formas. La buhardilla a dos aguas, que tiene dos paredes y un frente triangular, es el tipo más común que se encuentra en casas de estilo Craftsman y Tudor y otras viviendas modernas. Las buhardillas a dos aguas, que cuentan con una punta en la parte superior y están conectadas al techo por dos valles, cobraron popularidad con las casas de estilo Cape Cod de mediados de siglo. En un techo a dos aguas con extensión, el techo de la buhardilla se ensancha para ayudar a guarecer las ventanas y la saliente puede estar sujetada por ménsulas.
En lugar de tener un solo caballete como el techo a dos aguas, las buhardillas a cuatro aguas están diseñadas con una inclinación del techo hacia atrás a medida que sube y una proyección de las limas hacia afuera desde una punta. En general, este tipo de buhardilla es una copia del techo a cuatro aguas de la casa, que tiene cuatro lados inclinados que se unen en una punta.
Entre otros estilos se encuentran, la buhardilla con forma de barril, que tiene la parte superior redondeada, y la buhardilla con forma de ceja, que recibe este nombre por su forma curvada y la ausencia de paredes. La buhardilla de una vertiente, otro estilo popular desde la década de 1960, tiene un solo faldón unido al techo en el punto más alto o un poco más abajo. En las buhardillas de una vertiente, se pueden instalar ventanas de diferentes tamaños, por lo que son más populares en los chalets y las casas de estilo Craftsman. Las buhardillas de una vertiente extendida abarcan casi todo el ancho de una vivienda.
En lugar de colocarse directamente encima, la mayoría de los tipos de buhardilla se pueden encastrar en el techo. Si se empotra la buhardilla, las ventanas tendrán mayor profundidad.
¿Cómo se instalan los techos con buhardilla?
Si bien su instalación puede ser un poco trabajosa, la buhardilla aporta un toque visual distintivo a tu casa. Sin embargo, más que una simple opción estética, la buhardilla también genera espacio y luz natural, y permite convertir un sofocante espacio de almacenamiento en el ático en una cómoda área habitable.
Como las buhardillas están unidas al techo en dos lugares diferentes, la instalación correcta de las paredes de la buhardilla y de su propio techo es incluso más importante. La buhardilla necesita protección contra la nieve y el agua, así como un vierteaguas escalonado en las áreas vulnerables, para garantizar que la casa se mantenga hermética al agua y seca.
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