La llegada de otoño trae consigo temperaturas frescas y caída de hojas. Es posible que dediques tiempo a rastrillar esas hojas en el jardín, ¿pero sabías que es igual de importante retirar las hojas del techo?
Si quedan en el techo a lo largo de todo el invierno, esas hermosas hojas de colores cambiantes podrían causar algunos problemas graves, similares a los problemas generados por la acumulación de musgo. A continuación, se indican detalles clave que deben conocerse.
Cómo saber si las hojas son un problema
Es posible que, durante el otoño, veas algunas hojas en tu techo que simplemente se van volando en los próximos días de brisa. Pero si notas que las hojas se acumulan en algunas secciones de tu techo, esto puede ser motivo de preocupación, sobre todo si las hojas están mojadas y no se vuelan con el viento. Si observas que las hojas sobresalen por la parte superior de las canaletas, es otra señal de que hay que retirarlas.
Peligros de dejar las hojas en el techo
La probabilidad de que las hojas se acumulen en el techo depende en gran medida de la ubicación y la arquitectura de tu casa, pero la madre naturaleza también influye. Estos son los tres principales riesgos que puedes enfrentar si las hojas se amontonan en tu techo.
1. Daños por agua
La acumulación de hojas húmedas no solo añade peso a tu techo, también puede hacer que sea difícil que se seque tras una lluvia. Las hojas húmedas en el techo pueden provocar la aparición de moho y, a la larga, afectar el rendimiento de las tejas. Si esto ocasiona grietas en tus tejas, el agua podría filtrarse en el sistema de techo e ingresar a tu casa, y causar daños en el interior.
Las hojas suelen acumularse en el valle de tu sistema de techo, un área que es más vulnerable a los problemas por ser un espacio más bajo donde se juntan dos faldones. Cuando se dejan las hojas en el valle, sobre todo si están mojadas, es más probable que se filtre el agua.
También es importante retirar las hojas del techo antes de la primera nevada. De lo contrario, corres el riesgo de que queden atrapadas bajo la nieve durante semanas, dependiendo del clima local. La prevención es una gran manera de evitar daños por agua, pero para una mayor protección, puedes instalar barreras contra goteras de calidad para evitar que el agua penetre en tu sistema de techo.
2. Canaletas obstruidas
Las hojas del techo pueden llegar a tus canaletas e impedir que el agua fluya libremente por el techo y se aleje de tu casa. Si el agua no puede salir por el sistema de canaletas, se desbordará por la parte superior y los costados, y esto creará una acumulación de agua alrededor de tus cimientos y, probablemente, en tu sótano.
Si no se retiran, las hojas húmedas también pueden erosionar los gránulos minerales de las tejas y, con el tiempo, harán que estos caigan en las canaletas. La erosión de los gránulos puede obstruir tus canaletas, acortar la vida útil de las tejas y aumentar la probabilidad de que se produzcan daños por agua.
Por lo tanto, mantener las canaletas limpias es fundamental para que el agua no entre en tu casa.
3. Plagas
Un gran cúmulo de hojas en las canaletas o en el valle de tu techo puede ser un refugio atractivo para muchas plagas, como los insectos, los roedores y las aves. Si no se las desaloja rápidamente, podrían quedarse a vivir ahí. Los molestos bichos que hurgan entre las hojas pueden dañar las tejas y encontrar la manera de entrar en tu casa durante el invierno.
Una buena manera de evitar la intrusión de plagas es colocando las tapas de ventilación Master Flow® en todos los conductos y ventilaciones que sobresalen del techo, sobre todo en las tuberías de plomería, instalando el tapajuntas para funda de tuberías Master Flow(TM) Pivot(TM) de GAF, completamente metálico, que encapsula las tuberías de plomería antiestéticas y reduce el riesgo de que las plagas se coman los conductos de ventilación o dañen el tapajuntas de la tubería.
Cómo retirar las hojas de un techo
La mejor manera de quitar las hojas de un techo es llamando a un profesional en techos certificado* que tenga experiencia en trabajos en altura y para desplazarse con seguridad por un techo inclinado. Estas personas están altamente capacitadas y saben qué buscar.
Aunque quitar las hojas uno mismo con un rastrillo para techos o un soplador de hojas puede resultar tentador, subirse a un techo tiene sus riesgos. Podrías resbalarte, perder el equilibrio o incluso caerte del techo. Las caídas son la segunda causa de muerte por lesiones accidentales en adultos a nivel mundial. Los contratistas profesionales cuentan con formación y equipos de seguridad especializados para evitar caídas, por eso es mejor dejar la remoción de hojas en manos de profesionales.
Otra razón para no subir a un techo es que podrías dañar el sistema de techo sin darte cuenta. Caminar sobre el techo de forma inadecuada o utilizar un rastrillo para techos puede hacer que se desprendan gránulos. Un contratista profesional puede trabajar en el techo sin dañar tu sistema de techo. También puede detectar áreas que deben repararse antes del invierno y que el ojo inexperto no reconoce.
Si en tu casa hay hojas y desechos que deben retirarse antes de que llegue el invierno, comunícate con un profesional en techos certificado por GAF* de tu área para programar una limpieza e inspección.
*Los contratistas inscritos en los programas de certificación de GAF no son empleados ni agentes de GAF, y GAF no controla ni supervisa de otro modo estas empresas independientes. Los contratistas pueden recibir beneficios, como puntos y descuentos de recompensa por lealtad en herramientas de comercialización de GAF por participar en el programa y ofrecer a GAF garantías mejoradas, que requieren el uso de una cantidad mínima de productos de GAF. Tus tratos con un contratista y cualquier servicio que este te preste están sujetos a los Términos de uso para contratistas de GAF.