Muchos estados están comenzando a reabrir de manera parcial o total después de que el COVID-19 paralizara la economía. Sin embargo, si estás listo para volver a trabajar y comenzar a atender clientes de nuevo, hay varias consideraciones que debes tener en cuenta para mantenerte a salvo, así como a tus empleados y a tus clientes.
Estas son algunas sugerencias de cómo volver a trabajar de manera tan segura y productiva como sea posible:
Reconecta con clientes y clientes potenciales
Una de las primeras cosas que puedes hacer para reactivar tu negocio es contactar a antiguos prospectos que pusieron sus proyectos en pausa durante la pandemia.
Muchos clientes podrían seguir dudando sobre seguir adelante, pero puedes intentar tranquilizarlos compartiendo las políticas de seguridad de tu empresa ante el COVID-19. Explícales en detalle las estrategias que utilizarás para limitar las interacciones cara a cara y la posible exposición, como el manejo virtual de todas las comunicaciones con los clientes.
También puedes incentivar a los clientes potenciales ofreciéndoles una oferta especial para nuevos clientes, como un descuento para determinados tipos de proyectos. Aunque pueda parecer difícil ofrecer descuentos si tu empresa ha perdido negocios durante el cierre, ofrecer algún tipo de incentivo al cliente puede ayudarte a cerrar ventas.
En el caso de antiguos clientes, podrías considerar agregar una división de servicios y mantenimiento o empezar a vender otras líneas de productos, como canaletas, ventanas y recubrimientos, con el fin de volver a captar a clientes satisfechos que ya saben cómo trabajas.
Prioriza los proyectos
Debido a que la construcción se considera un negocio esencial en muchos estados, es posible que hayas seguido trabajando en algunos proyectos de techado durante la cuarentena. Sin embargo, ahora que la economía está comenzando a reactivarse, podrían aparecer ciertos clientes que estén ansiosos por dar inicio a proyectos que debieron dejar en pausa, además de las reparaciones o sustituciones urgentes que ya tenías en vista.
Considera varios enfoques para poder priorizar los proyectos nuevos o atrasados. En primer lugar, podrías priorizar las necesidades de los clientes de acuerdo con los requisitos y los plazos del proyecto. Por ejemplo, si un propietario de vivienda ha sufrido daños importantes en el techo y necesita volver a su casa en una fecha determinada, es posible que debas empezar con ese proyecto primero.
El presupuesto del proyecto también es una consideración importante, en especial, si el flujo de efectivo es un problema para tu negocio. Si un cliente tiene un proyecto grande y cuenta con el presupuesto, podría ser una buena idea comenzar con ese proyecto cuanto antes.
Además, el personal y los recursos podrían determinar qué proyectos abordar. Es posible que tengas empleados que se enfermaron y se estén recuperando, o empleados que tuvieron que cambiar de trabajo después de que la actividad laboral se ralentizara en tu empresa. La fuerza laboral limitada podría impedir que tomes determinados proyectos enseguida, por lo que quizás deberías enfocarte en menos proyectos de techado o en techos más pequeños para comenzar. Ten en cuenta todos estos factores cuando decidas qué proyectos priorizar.
Mantén a los empleados y a los clientes a salvo
La seguridad de los clientes y de los empleados es una de las consideraciones más importantes a la hora de reanudar el trabajo después del COVID-19.
En muchos estados, se proporcionaron medidas de seguridad para la industria de la construcción. Entre ellas, garantizar que los empleados en las obras se laven las manos con agua y jabón durante, al menos, 20 segundos o, si no es posible lavarse las manos, que utilicen un desinfectante de manos con un mínimo del 60 % de etanol o el 70 % de isopropanol antes de abandonar la obra.
Debes asegurarte de que los empleados respeten el distanciamiento social tanto dentro de la oficina como en los sitios donde realizan los trabajos. Siempre que sea posible, debes permitir que los empleados trabajen desde casa. El papeleo y las llamadas telefónicas pueden realizarse de manera virtual, por lo que no hay necesidad de que el personal administrativo esté en la oficina todo el tiempo.
En los sitios de trabajo, los trabajadores siempre deben usar mascarillas, además de evitar el contacto personal y saludarse con las manos tanto como sea posible. También deben limitar los encuentros cara a cara con los clientes y, en cambio, realizar reuniones virtuales usando aplicaciones como Facetime, Google Hangouts, Skype o Zoom. GAF ofrece varias herramientas digitales, como GAF QuickMeasure y GAF e360, para ayudarte a tomar medidas a distancia y a crear renderizados 3D a partir de las fotos de tu smartphone. Usa estas herramientas para tu beneficio y para mantener la seguridad de los empleados y de los clientes.
Volver al ruedo
A pesar de que los estados estén comenzando a reabrir, los riesgos para la salud del COVID-19 no desaparecieron. Es más importante que nunca que en tu empresa se tomen medidas para proteger a los empleados y a los clientes, incluso mientras buscas ofrecer el mejor servicio posible.
Si está todo listo para volver a trabajar, visita el sitio web de tu departamento de salud local o estatal para conocer los lineamientos específicos sobre cómo reanudar las operaciones comerciales con seguridad. Usar estos recursos puede hacer que estés mejor posicionado que nadie para dirigir tu empresa de forma segura y exitosa durante estos tiempos difíciles, además de ayudar a tu empresa a adaptarse a esta nueva normalidad.