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¿Cuánta nieve puede soportar un techo de forma segura? Señales de riesgo y cuándo llamar a un profesional

Por Karen L Edwards

06 de diciembre de 2025

A typical american house in winter. Snow covered.

La nieve recién caída aporta una serenidad especial a cualquier paisaje, pero cuando empieza a acumularse, puede convertirse en una señal de peligro para el techo de tu casa. ¿Cuánta nieve puede soportar un techo? La respuesta depende de muchos factores, como el estilo y la ubicación de tu casa, la cantidad de nieve que cae cada año en tu región y si realizaste el mantenimiento preventivo antes de la temporada de nieve.

Sigue leyendo para conocer más sobre las cargas de nieve, los factores que pueden afectarlas, las señales de advertencia a las que debes prestar atención y cuándo es el momento de llamar a un profesional para que retire la nieve del techo de tu casa.​​​​​​​

¿Cuánta nieve puede soportar un techo?

La carga de nieve en el techo es la cantidad de peso y presión descendente que ejerce la acumulación de nieve y hielo sobre su superficie.

Cada techo soporta un nivel distinto de carga de nieve según varios factores, como su pendiente y la exposición al sol. También influye si la nieve es ligera y esponjosa o húmeda y densa, por lo que no existe una cifra única. Muchos techos están diseñados para soportar una carga de nieve de 20 libras por pie cuadrado, pero, como mencionamos antes, este valor puede variar.

No toda la nieve pesa lo mismo. Por ejemplo, un pie de nieve ligera en polvo puede promediar alrededor de cinco libras por pie cuadrado, mientras que un pie de nieve pesada y húmeda puede alcanzar 20 libras por pie cuadrado o más.

Tu sistema de techo trabaja intensamente para resistir los desafíos que traen las diferentes estaciones del año, por lo que tomar precauciones y realizar inspecciones periódicas es clave para mantener un desempeño confiable.

Factores que afectan la capacidad de nieve del techo

  • Diseño y pendiente del techo. Cuanto más inclinada sea la pendiente del techo de tu casa, más fácil será que la nieve y el hielo se derritan y se deslicen. En cambio, los techos planos necesitan más tiempo para que la nieve y el hielo se derritan, drenen o se evaporen.

  • Materiales y antigüedad del techo. Todos los materiales para techos se debilitan o degradan con el tiempo; es algo normal y esperado. Sin embargo, esto puede afectar la capacidad del techo para resistir los daños causados por la nieve y el hielo. Además, las zonas que hayan sufrido daños por tormentas no tendrán la misma tolerancia a las cargas de nieve que los materiales más nuevos.

  • Códigos de construcción regionales. Si tu casa se encuentra en una zona geográfica con inviernos nevados, es probable que los códigos de construcción locales lo tengan en cuenta. En estas regiones suele exigirse que los sistemas sean más resistentes, capaces de soportar el peso de cargas de nieve importantes.

  • Sistemas de soporte subyacentes. La estructura del ático y el estado de las vigas influyen directamente en la cantidad de carga de nieve que puede soportar el techo de tu casa. Si tu casa es antigua y las vigas están debilitadas, podrán sostener menos peso que las vigas más nuevas y robustas. Piensa en tu techo como si fuera una repisa: solo puede sostener el peso que sus soportes permiten.

No toda la nieve pesa lo mismo

Cuando preguntas cuánta nieve puede soportar un techo, la respuesta también cambia según el tipo de nieve. La nieve fresca y en polvo es la más ligera, con un peso aproximado de cinco libras por pie cuadrado. Si alguna vez intentaste hacer una bola o un muñeco de nieve con nieve muy ligera, ya sabes que no tiene suficiente humedad para que los copos se adhieran entre sí.

Cuando la nieve tiene tiempo para asentarse o compactarse, se vuelve más pesada. El ciclo de congelamiento y deshielo aumenta su nivel de humedad, lo que se traduce en más peso acumulado sobre tu techo.

Si la nieve que cae es húmeda y densa, es perfecta para construir muñecos de nieve y bolas de nieve, pero también es el tipo que más presión ejerce sobre el techo. Este tipo de nieve puede pesar 20 libras por pie cuadrado o más, lo que puede generar una presión importante y posibles daños en el techo. La formación de hielo o carámbanos también puede causar daños y reducir la tolerancia del techo a la carga de nieve.

Señales de advertencia de que hay demasiada nieve en el techo

Si tienes nieve o hielo acumulados en el techo, es normal que te preguntes cuánta nieve puede soportar. Presta atención a las señales de advertencia para saber si necesitas contactar a un profesional. Realiza una inspección visual en busca de señales de problemas tanto en el exterior como en el interior de tu casa para determinar si hay goteras.

Desde el nivel del suelo, observa la línea del techo para detectar si parece combada o si hay superficies irregulares. Revisa las canaletas para ver si comienzan a separarse de la casa, ya que esto puede ser una señal clara de daño.

Dentro de tu casa, revisa el ático para detectar señales de humedad o aislantes mojados. Examina los techos o las paredes para ver si hay manchas de agua o grietas en los paneles de yeso. Las puertas y ventanas que empiezan a atascarse de repente también pueden indicar daños por nieve. Si escuchas ruidos de chasquidos o crujidos, o notas que las paredes comienzan a combarse, considéralo una emergencia y llama a un profesional experimentado lo antes posible.

Remoción de la nieve: por qué es importante la ayuda profesional

La seguridad durante la remoción de la nieve debe ser una prioridad, especialmente al usar una escalera o al subir al techo cuando hay nieve y hielo. Siempre comienza con opciones que te permitan mantener los pies firmes en el suelo, como un rastrillo extensible que alcance las áreas más bajas del techo y te permita quitar la nieve de los bordes.

Si la nieve en tu techo es muy profunda, compacta o helada, es momento de llamar a un profesional. Los contratistas de techos tienen experiencia en el manejo de nieve y cuentan con el equipo y las medidas de seguridad adecuadas para resolver el problema sin poner en riesgo tu sistema de techo ni la seguridad de su equipo.

Intentar hacerlo por tu cuenta puede dañar las tejas, lo que podría anular la garantía del sistema de techo, además de ponerte en riesgo de sufrir lesiones. Lo mejor es preparar tu techo con anticipación y tener un plan, incluido un contratista de confianza al que puedas contactar antes de la tormenta.

Protege tu inversión en techos

La carga de nieve varía según el tipo de techo, su antigüedad, la densidad de la nieve y la región donde vives. Toma en serio la seguridad del techo durante el invierno y busca reducir los riesgos al preparar tu sistema de techo antes de la temporada de nieve.

Mantente atento a las señales de advertencia, actúa desde el suelo siempre que sea posible y llama a profesionales para que se encarguen de las tareas más complejas de remoción de la nieve. También puedes programar una inspección del techo después de una tormenta de nieve, una vez que todo se haya derretido, para asegurarte de que tu techo siga en óptimas condiciones.

Acerca del autor

Karen L. Edwards es una profesional de la industria del techado a la que le apasionan las comunicaciones, el intercambio de información y la capacitación sobre temas que elevan al sector en general. En calidad de consultora de la industria, se desempeña como directora ejecutiva de RT3 Think Tank, una asociación centrada en promover el uso de la tecnología en el sector del techado, es directora de Operaciones de RoofersCoffeeShop® y trabaja con contratistas y representantes de fabricantes de todo el país para ayudarlos en sus esfuerzos de marketing y comunicación. Presenta varios podcasts, y es probable que la veas en numerosas ferias y eventos del sector, informando y entrevistando a profesionales de la industria del techado en vivo por YouTube.

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