Uno de los puntos de venta de las membranas de una sola capa aptas para soldadura en caliente es que las uniones completamente soldadas ayudan a crear una sola membrana a partir de varias láminas. No hay uniones con adhesivo que puedan despegarse, y una unión bien soldada puede ofrecer, incluso, mayor protección que el resto de la membrana, ya que tiene el doble de grosor. Todo esto suena muy bien, pero ¿cómo prueba el fabricante la resistencia de la soldadura?
A continuación, te mostramos cómo probamos la resistencia de la soldadura en GAF:
El primer paso es soldar el TPO utilizando el mismo equipo y configuraciones que se usan en un techo. De hecho, realizamos muchas soldaduras a distintas velocidades y temperaturas para cubrir la mayoría de las condiciones.
Luego se corta una tira y se tira de ella para verificar la calidad. Aquí tienes una sección transversal de cómo se ve realmente un corte de soldadura:
En GAF usamos equipos de prueba de máquinas fabricados por Instron que nos permiten medir la resistencia real. La muestra se monta entre dos mordazas de acero y se tira, como se muestra aquí:
La máquina registra la fuerza necesaria para realizar el tirón. Si se observa la imagen central, se verá que la capa superior se ha roto. Después de eso, la capa superior se despega del núcleo, como puede verse en la imagen de la derecha. Si la propia soldadura se abre, entonces es una mala soldadura. La imagen de la derecha muestra lo que llamamos una unión por desgarro de lámina. Hemos arrancado la lámina de la capa superior o del núcleo directamente de la membrana, dejando expuesta la tela de refuerzo. Nuestro equipo de prueba informa la fuerza mediante un gráfico que se ve así:
Esto muestra que se necesitó una fuerza máxima de aproximadamente 48 libras-fuerza para romper la capa superior o el núcleo. Luego, para despegar la capa superior del núcleo, se necesitó aproximadamente 20 libras-fuerza. Se trata de cifras contundentes.
Recomendamos a los techadores que realicen una prueba manual de soldadura al inicio de cada día, después del almuerzo y siempre que cambien las condiciones. ¡Esto garantiza que el producto se suelde correctamente y mantenga la misma resistencia día tras día, metro tras metro de membrana!



